Una de las derivaciones de la cultura oriental para el diseño de interiores es la decoración Zen. Las raíces filosóficas del Zen están fundadas en la vida y enseñanzas de Buda, y su expresión máxima se dio a mediados del siglo XIII, además de la constante influencia del yoga, se tiene como base de decoración el uso de la madera, los colores blanco, ocre, beige y contrastes como el negro, ideal para tener una percepción visual de equilibrio y gran armonía